Conticinio

Como el conticinio pasajero que pasa por la rica brisa de la tarde por mi cara, así debe ser la vida antes las risas y cosas tristes que vivimos en esta aventura que nació de una noche de poesías oscuras.

Tu cuerpo tan hermoso como una citara que le da la melodía perfecta a los acordes de mi triste melodía esta noche, esa poesía que se desangra dentro de mi yo interior por algo que sé que ya pasara con el correr de las lágrimas.

Adiós nube pasajera en que una vez soñaba en aquella montaña con esa mujer sin rostro que me recitaba bellas palabras con su voz rica y suave a mis oídos, adiós a aquellos sueños en vano nacidos de la nada que un día fue no más que la simple nada, valga la redundancia.

Y soñé que te lloraba un rio, no me refiero a mis enésimos de poemas escritos, este es un poema tan real como el Lucero del Alba que sale en mis tardes y se entristecen en mis amaneceres, tan solo un suspiro de tu presencia anhele y soñé,  como la brisa de verano, suave como siempre te espere.

No se que hacer con esta tristeza,te busco en mi sofa de las noches,con un cigarro y un vodka amargo como el momento,las añoranzas de aquellos momentos me hacen llorar como un blus,un sentimiento extraño.

Te reconocí en tu plena tarde, tus cabellos libres ante la verdad que te rodea, fría como el viento, sin una sonrisa que te robé quizás a la azar o simplemente suerte. Te recuerdo así  corriendo libremente, imposible de alcanzar, tan peligrosa como el azahar.

Y es que mis pasos al andar estas tu en mis recuerdos tomada de la mano agarrando cada rosa por el camino en el otoño primaveral,pero tu sonrisa hace mas bello el momento fraternal de aquella relacion que jamas va a acabar.

Ayudame a no soportar mas esto que me agobia,eres el primer primor vivido en mi vida,no te alejes de mi porque corro detras de la soledad sin querer,pero jamas volvere a mendigar un amor que no corresponda a su debido lugar como el que siento por vos

Déjame no volver  más a la terrible soledad, si es la muerte os dejadme morir entre tus brazos como el jamás no nacido, prefiero no ver más que soportar tu partida.

Extraño a esa mujer que cada noche y cada mañana era mi alegría, la que caminaba ante la mañana susurrando mi nombre porque lo sentía, siento que ya no me amas, y si tengo todo pues no tengo tu mirada, tengo todo excepto a ti ni el sabor del color de piel que vistes.

Te amo S de Key