Carta Pervertida de Día de San Valentín

Al decir verdad nuestra corta relación

Fue una selva de pasión y deseo

Te pienso aun y el pene se me pone más templado que cuerda de violín

Más tieso que pata de perro envenenado.

Recuerdo aquel día de san Valentín

Lo hicimos por primera vez

Llevabas pantalón negro y camisa negra

El frio del aire era de suspenso…

Te empecé a besar por el cuello suavemente,

Mientras te agarraba las nalgas

Te recostaba mi miembro erecto en la barriga

Recuerda que eres de baja estatura.

Luego te quite la camisa y que bello,

No pude quitarte o mejor dicho nunca pude quitarte el sostén recuerda.

Empecé a andar por el terreno jamás caminado,

Fui el primero en andar por esos lugares de tu cuerpo

Luego baje por el camino que esta por el ombligo,

Llegue a tu vulva, eso estaba nuevo, que hermosura de vulva…

Empecé a pasarte la lengua lentamente, de arriba hacia abajo

Descubrí que en un punto de tu vagina, te excitabas mas

Ahí seguí besándote, cada vez más rudo,

Estabas demasiada húmeda y botabas un líquido blanco

Ese sirvió para una penetración no dolorosa y traumática,

Llego el momento de introducirte el pene,

Éramos dos inexpertos en el sexo, algo hermoso…

Recuerdo que te lo metí y no sabía y me dijiste ya está adentro papi

Te pregunte:¿te duele mami? Y me dijiste: si pero rico papi…

Yo estaba encima de ti y tú con las piernas abiertas a 90º

Luego te junte las piernas y las puse en alto, y te daba suavemente

Que cuca tan rica, carnosa y de labios gruesos…

Luego te puse en cuatro patas, era mi posición preferida

Me hacía eyacular, con tan solo ver mi pene dentro de tu vagina,

Acabe y fue algo tan rico como estar en el aire,

Se te desmayan las piernas, y el condón full de espermatozoide.

Luego te puse en el acto de felación y me dijiste: no se papi

Te dije: hazlo como si estuvieras con una chupeta, así fue

Estaba de nuevo erecto, mientras me lo besabas te metía los cuatro dedos

Tu vagina ya no era virgen…

Con mi pene te daba cachetadas y ya agarraste confianza y me lo mordías

La inocencia ya se perdió, me besabas los escrotos,

Te lo metí otra vez muy erecto, yo era en ese momento de hierro

Me dijiste: suave papi que está muy duro,

Paso el rato, la respiración era más fuerte

Los gemidos en mi oído me convertían en un salvaje

Me enterrabas las uñas en la espalda, el pene estaba lleno de baba de tu vagina

Me costó llegar a eyacular, pero llegue y los dos quedamos tumbados en la cama,

Con la respiración entre cortada…uff

Dormimos un rato, luego desperté y te empecé a besar las nalgas y agarrarte los senos,

Te desperté y abriste las piernas, estabas muy humedecerás, una chica caliente

Lo volvimos a hacer como una hora hasta quedar exhaustos pero rico,

Llego la tarde nos teníamos que marchar, besos rico tuvimos,

Quedamos adoloridos como si hubiésemos hecho deportes,

Paso dos semanas y nos provocó hacerlo ya era otra etapa…

Luego no nos podíamos ver porque nos violábamos,

Me lo mamabas en la sala rico en aquel sofá viejo,

Mientras que veíamos expedientes secretos,

Llegaba gente de la casa que pasaba a la cocina

Y te quedabas con el pene en la boca y tus cabellos tapaban tu rostro…

Lo hacíamos en el sofá habiendo gente, el placer nos hacía valientes…

En el porche me lo mamabas, lo hacíamos tu encima de mí,

Usabas shores de dormir y te lo metía por un lado, que rico…

En tu cuarto lo hacíamos detrás de la cortina, asustado de que nos vieran

Pero fueron los polvos más ricos…

En la cocina mientras hacías la salsa para pasta y te ponía mi pene erecto

En tus nalgas y te acomodabas y te levantabas la bata o el shore de un lado.

Recuerdo la vez que te lo hice anal, las lágrimas se te salieron pero me pedías que no lo sacara

Yo sé que anal acabas más rápido perrita…

En el lavandero lo hicimos, en la playa en plena tarde el mar,

La gente bañándose y nosotros haciéndolo con el vaivén de las olas…

A veces llegabas del trabajo y me decías voy a bañarme estoy hedionda

Y así te mamaba la cuca sudada y hedionda, o peluda que rico…

Mi leche la aprendiste a tolerar, gastamos mucho en hoteles,

Pero con gusto y agrado…

Nuestro amor fue no más que una perversión sexual, sádica, llena de muchos orgasmos,

Sexo sucio, cochino, lleno de un pacer único…

Todo comenzó desde aquel día de san Valentín te hice por primer vez mujer,

Dicen que el segundo amor es el mejor que se vive,

Fuimos los primeros en nuestras vidas y con eso me conformo,

En tu vida sexual fui el descubridor, el conquistador, el maestro de esos terrenos vírgenes…

Eres una perra en la cama, eres sucia, y sé que a veces te provoca que te coja, y sé que te masturbas,

Eres la perrita que marco mi perversión sexual, soy un enfermo del sexo, sucio, asqueroso, morboso,

Soy lo que soy gracias a ti perra por sernos uno al otro una escuela de perversión…